El mes de mayo es también conocido como el mes de las flores. La primavera ha traído nuevos brotes a los campos de la Serranía de Cuenca y en este momento son muchos los animales que se alimentan de todos estos pastos.
Los corderos de nuestra asociación no son menos y cada día aparecen nuevos elementos que añaden su caracter a nuestra carne. En los meses anteriores, como ya hemos dicho, han aparecido nuevos brotes en las distintas plantas autóctonas de la Serranía de Cuenca y a partir de este momento son las flores las que añaden color.
Durante este mes empiezan a florecer el tomillo, la mejorana, el espliego… alimentos muy apreciados por las ovejas y corderos y que son muy numerosos en la Serranía de Cuenca.
El mes de mayo es clave para la carne de cordero Serranía de Cuenca
Cada uno de estos nuevos brotes y de las flores que aparecen en los pastos de la Serranía de Cuenca incorporan nuevos matices al sabor y aroma de la carne de los corderos criados dentro de nuestra marca de calidad. Gracias al tipo de alimentación y la forma de cría de los animales incluídos en nuestra marca cada día son más las personas que aprecian y buscan la carne de nuestros corderos.
Tal y como podéis ver, el mes de mayo no sólo mejora la temperatura y aumentan las horas de luz sino también ofrece nuevas posibilidades de alimentación a los corderos que crían los ganaderos de la asociación.
Si sumamos este aumento en la variedad de alimentos a la cantidad de kilómetros que cada día recorren las ovejas, encontraremos una carne tierna, sabrosa y con la cantidad de grasa justa. Esta combinación hace que cualquiera de los múltiples platos que se pueden preparar con el cordero como ingrediente principal sean dignos de los paladares más exigentes.